¿Paz? ¿Justicia? ¿Instituciones fuertes?
En el año 2018, 23 mujeres perdieron la vida a mano de sus parejas o exparejas en
Puerto Rico. Cifra que supera la mitad de los casos reportados en el año 2017. Así lo asegura
Bárbara Figueroa Rosa, periodista que entrevistó a Sonia Nieves, madre de
Suliani Calderón, la sexta víctima de violencia de género en el 2018. En la
noticia titulada “Figuras del 2018:
mujeres asesinadas que lucharon por sus vidas”, no solo se relata la
historia de Suliani desde la voz de su madre, porque ella no pudo contarla,
sino que también hace un reconocimiento al resto de las 22 que ya no están
presentes.
(Primera Hora, 12-25-2018)
¿Paz? Las mujeres no vivimos en paz.
No importa el estrato social al que pertenezca, la edad, las condiciones, el
lugar, la hora, nos enfrentamos constantemente a un mundo marcado profundamente
por el patriarcado, machismo, y el conservadurismo. Las mujeres son vistas
todavía como pertenencia del hombre, y como las encargadas de la casa y los
hijos. Se espera que sean delicadas, decentes, femeninas, calladas, poco
inteligentes, sumisas, y se ven como un objeto sexual. Así plasmado parecería
que se trata de unos tiempos lejanos al presente, pero la realidad es que estas
conductas y expectativas de la mujer están presentes de igual forma o peor que en los tiempos más
conservadores. Actualmente, las mujeres tienen trabajar fuera de sus casas, más
al llegar a ella (sin ningún tipo de remuneración). Así que se trata de un peso
y una presión sumamente fuerte que nos agota física, emocional y
espiritualmente.
¿Justicia? Por mencionar uno de los
ejemplos más recientes, la Colectiva Feminista, el año pasado entre protestas y
manifestaciones, exigió al gobernador la declaración de un estado de emergencia
ante las cifras alarmantes de feminicidios que estaban ocurriendo en el país.
La Colectiva marchó hasta la Fortaleza con un Plan Nacional contra la Violencia
Machista que sería implementado si el gobernador firmaba la Orden Ejecutiva. Sin
embargo, sus reclamos no fueron atendidos por el primer ejecutivo. El Plan
también solicitaba una auditoría de la cantidad de “rape kits” que aún no se
han procesado en el Negociado de Ciencias Forenses. Esto definitivamente no es
hacer justicia para las mujeres, ni para las que ya no están presentes, ni para
las 2,254 víctimas de agresión sexual entre el 2006-2018, cuyos agresores siguen
por la libre.
¿Instituciones fuertes? Entiendo que una de las instituciones más
importantes en el desarrollo del ser humano o de un país es la educación. El 25
de febrero de 2015 se radica la Carta Circular 19-2014-2015 de Política Pública
sobre Equidad de Género y su integración al currículo del Departamento de
Educación de Puerto Rico como instrumento para promover la dignidad del ser
humano y la igualdad de todos y todas ante la ley. El 8 de febrero de 2017, el
Departamento de Educación eliminó el currículo de enseñanza de equidad de
género mediante la Carta Circular
32-2016-20017, en la cual también, la Secretaria de la agencia, Julia Keleher,
dejó sin efecto la directriz que permitía que los estudiantes de las escuelas
públicas utilizaran uniformes escolares que correspondían con su identidad de
género. La Carta Circular 32-2016-2017 expone que toda política pública deberá
proveer la protección y enseñanza de los valores de nuestra sociedad
puertorriqueña. También que las iniciativas que presente dicha agencia deben
estar basadas en el respeto a la diversidad de ideas y convicciones como uno de
los principios básicos que definen a los puertorriqueños. Lo cual resulta una
contradicción entre palabras y acciones. De hecho, la Ley 108-2006 que enmendó
la Ley Orgánica del Departamento de Educación para que atendiera la equidad de
género en miras a prevenir la violencia doméstica, no ha tenido efectos
significativos, tomando en cuenta los 23 feminicidios el año pasado, y los
nuevos casos que van surgiendo este nuevo año. Por eso necesario llegar más a fondo en este tema y no
dejar las palabras sobre papel.
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ReplyDeleteEs imprescindible, mediante la educación, concientizar a la sociedad sobre estos temas. La educación es clave para el avance de estos procesos. Bien, es cierto, que las mujeres han alcanzado ciertos derechos que le permiten estar en una mejor posición que antes. Sin embargo, continúan siendo silenciadas por diferentes instituciones sociales que perpetúan perspectivas conservadoras en sus respectivos discursos. No es una utopía alcanzar la paz, la justicia y instituciones fuertes, puesto que de ser así no se promovería el cumplimiento de los objetivos de esta agenda. Además, hay países en el mundo que han optado por una sociedad más igualitaria para hombres y mujeres. Es cuestión de organizarnos en colectivo hacia el alcance de estos derechos.
ReplyDeleteConsidero que hemos logrado posicionarnos dentro de diversos esenarios en la sociedad, pero nos falta mucho hacer. El hecho que se haya comenzado a desarrollar un movimiento de concienciación representa un gran avance para reconocer y validar nuestros derechos como mujeres. La educación juega un papel importante dentro de la deconstrucción social que tanto ahnelamos, es una responsabilidad social y colectiva el que rompamos con estigmas que limitan y restringan nuestras posibilidad de desarrollo. Comparto la idea de que las mujeres no vivimos en paz, el salir a la calle nos posiciona en una desventaja. El tener que lidiar y luchar diariamente con conductas machistas y patriarcales es totalmente indignante. La lucha debe continuar, por nuestros derechos y los derechos las próximas generaciones.
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